Que levante la mano aquellos que hayan visto visto ya imágenes de cajas de frutas reutilizadas. Si realmente hacemos este ejercicio, la mayoría de ustedes levantarían la mano casi hasta el cielo y gritarían a viva voz ¡yo, yo, yo!
La decoración industrial está a la orden del día en la mayoría de los catálogos decorativos, en las fotos de los blogs, etc. Y con ella se ha implantado la mentalidad de recuperar objetos que pensábamos que tenían solo un uso.
Este caso es el de las cajas de madera, en las que se transporta la fruta. Si hablan con mi familia y amigos os dirán que soy una loca de las mismas… tengo una en casa recogida de un contenedor para hacer un DIY muy bonito para una amiga, otra en el maletero del coche (porque ya no me cabe en casa, señores!) que me trajo una compañera, y todo el día dándole vueltas a mi coco para pensar qué puedo hacer con ellas para que queden perfectas.
Si dan una vuelta por Pinterest, podrán ver millones de fotografías bonitas con este pequeño objeto que se puede convertir en algo muy grande.
Afortunadamente la madera de estas mismas es perfecta para tratarlas o simplemente para dejarlas como está. Es toque antiguo que muestran en su estado natural es perfecto para muchos. Dependiendo el gusto y la necesidad que tengamos podemos conseguir infinidad de variantes sobre las mismas, es decir, ¡una caja de sorpresas!, señores, entre manos tenemos una caja llena de sorpresas, en función de como funcione nuestra imaginación.
Con unas ruedas (que pueden encontrar en cualquier ferretería) se consiguen unos perfectos cajones para guardar cosas y más cosas, y ya no les digo nada sobre la perfección de la misma si se le añade unas rallitas de pintura. Además de facilitarles la organización, están decorando! Sí, sí, decorando.
El uso más normal, a parte de decorar millones de bodas, fiestas, cumpleaños, ect. Es para organizar las cositas de nuestro estudio o de nuestro lugar de trabajo, miren la foto siguiente, qué les parece poner títulos a cada una de ellas para saber exactamente que debemos guardar en las mismas.
Hay mil y un usos de estas cajas, se pueden decorar con periódicos, pintarlas de un solo color, ponerlas apiladas, etc. Afortunadamente la madera de la que están fabricadas las mismas, normalmente es pino, lo que supone una facilidad para customizarlas. Esta madera tiene una gran capacidad para admitir cualquier producto que usemos. El poro está cerrado, ya que los tratamientos que les dan cuando las comercializan es de pulirlas mucho para conseguir ese color blanco que les caracteriza. No se echen las manos a la cabeza pensando que me he vuelto loca y no que no pueden hacer nada ya con las mismas, con lijarlas un par de veces o pasarlas un cepillo de cerdas para abrir el poro ya tienen finalizado el primer paso para trabajar con ellas.
Piensen, tengan quebraderos de cabeza, sueñen con qué les gustaría hacer con estas pequeñitas cajas. Siempre van a tener una idea en la cabeza. De verdad se lo digo, pero con un whastitape, un color fluor o nogalina pueden conseguir maravillas! Les animo a ello.
¿Qué les parece? ¿Una customización fácil y lo ponemos en alguna parte de nuestra casa?
The JuJu Hat 
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